"Un hombre que cambio el mundo"

En 15 años de sacerdocio el Padre Hurtado dejó un importante legado en obras materiales para los más pobres y varias publicaciones. Su vocación religiosa comienza a manifestarse a muy temprana edad, siendo niño “oficia una misa” para sus amigos y su perro. Alberto cursa sus estudios de preparatoria y humanidades (Ens. Básica y media) en el Colegio San Ignacio. Durante su tiempo libre en el colegio visita y ayuda a los más necesitados, práctica que continuara durante sus estudios de derecho, junto a sus compañeros Manuel Larraín y Augusto Salinas.

Nuestro colegio San Ignacio ha implementado hace mucho tiempo varias actividades de ayuda y recreación para sus estudiantes y así llevar el ejemplo que nos dejo este gran santo.
Lo cierto es que además de ayudas hacia la demás gente, el colegio tiene actividades para orientar a sus propios alumnos en el espíritu y acercarlos más a nuestro señor Jesucristo con actividades como el campamento de la amistad que lo realizan los alumnos que cursan el nivel de primero medio, los cuales también realizan el Encuentro con Cristo que es una de las actividades más importantes del establecimiento.

No se puede dejar a un lado la ayuda que nos otorgan nuestros sacerdotes, Andres Lira, Javier Ossa y El querido y tierno padre Mario los cuales con el gran lema del colegio, "entramos para aprender y salimos para servir", nos otorgan misas preciosas ya sean para toda la comunidad los días domingo o sino la Capellanía que se hace sus respectivos días para cada curso.

"Contento, señor, contento" es la gran frase que decía nuestro santo jesuita que con mucho esfuerzo formo El Hogar de Cristo el cual ayuda a la gente que esta desamparada y botada como si fuera un perro en la calle, por eso es que nuestro colegio es el que nos guía para que seamos como El Padre Hurtado y así podamos construir un Chile mejor y más Solidario. Desde que ingresamos al colegio y hasta terminar nuestro respectivo cuarto medio nos llevamos una gran responsabilidad, que es la de ayudar a nuestro prójimo, quererlo y respetarlo para así tener un buen espíritu y el día en que nos vamos nos reciba cristo en su regazo. Lo mas hermoso es que aprendemos mucho, ya sea en la parte del estudio y de nuestro espíritu el cuál se ha ganado el cariño de todos los profesores que ayudan y enseñan todo lo que ellos saben para que seamos profesionales en lo que estudiemos y quizás siguiendo el ejemplo de nuestro santo, el Padre Hurtado, sigamos el camino del señor para ser un gran sacerdote.

Por: Roberto A. López Barra

Fecha: 24/10/2006