miércoles, octubre 04, 2006

"Postimpresionismo"


El postimpresionismo surge hacia 1880 como ruptura frente al impresionismo. Si en aquél los artistas pintaron la mera apariencia, en el postimpresionismo se reconstruye la forma. Por ello, esta tendencia también ha recibido el nombre de "constructivismo".

CARACTERÍSTICAS

- Interés por la construcción de la f orma, el dibujo y la expresividad de los objetos y figuras humanas.
- Conciliación entre efecto volumétrico (conculcado por el fulgor luminoso impresionista que casi había desmaterializado las formas) y el gusto puramente estético (Cézanne).
- Concepción del cuadro a base de cuerpos rigurosamente geométricos (Cézanne).
- Empleo de colores contrastantes para distendir y definir los planos y formas.
- Efectos pictóricos basados en búsquedas estructurales, espaciales y cromáticas.
- Utilización de colores puros con gran carga emotiva (Van Gogh) y modulados (Gauguin).
- Creaciones imaginativas a base de pinceladas cursivas que intentan expresar la angustia y el desconsuelo interior (Van Gogh).
- Interés por lo exótico (Gauguin) y los bajos fondos (Toulouse-Lautrec).
- Creación de composiciones simplificadas y estáticas, buscando la armonía de las masas cromáticas encerradas en perfiles bien ceñidos (Gauguin).

Vincent Van Gogh

Hijo de un austero pastor protestante holandés, nació en Zundert, Brabante Septentrional. Su nombre fue el mismo que sus padres le dieron a su hermano mayor que murió un año antes de que él naciera, a los pocos meses de vida y el primer paisaje que el vio fue el de la tumba de su hermano muerto. Fue muy temperamental desde su infancia y siempre buscó la muerte, pero a través de la vida. Empezó a aficionarse a la pintura desde la escuela, en donde no era buen estudiante, pero durante toda su vida si se enorgullecía de ser un gran autodidacta. Pese a su dedicación a los dibujos muchos maestros de este arte le dijeron que nunca iba a ser un pintor profesional porque no sabía pintar. Esto no lo rindió en su afición y trabajó con tres parientes suyos marchantes de arte en Londres. A su vuelta de Inglaterra se obsesionó con La Biblia y quiso hacerse teólogo y estudió para ello en la Universidad de Leiden. Para demostrar su profunda creencia en la religión cristiana pidió ser misionero en varias compañías, pero fue rechazado por no saber ni latín ni griego, pero un dirigente se compadeció de él por su profundo fervor y lo mandó como misionero a las minas de Borinage, en Bélgica. Allí durante 22 meses dio todo lo que tenía a los mineros, ropa, dinero y comida, además de realizar sus primeras pinturas. Estuvo demasiado abstraído en la religión y muchos le llegaron a temer. Decía que estaba obligado a creer en Dios para poder soportar tantas desgracias.

Poco después marchó a Londres de nuevo para montar un hospicio para niños junto con un pastor inglés que le reportó un pequeño beneficio. Sin embargo se empezó a hastiar de la religión y sobre todo de aquellos que estaban al frente de ella, ya que los consideraba hipócritas. Se marcha a La Haya por la mala relación que tiene con sus padres y conoce a Sien, una prostituta de la cual él se compadece. Se inspira en ella y dibuja de forma frenética. De ella contrae la gonorrea y la sífilis. Sus padres van a visitarlo al hospital al enterarse de la enfermedad de su hijo y el padre le echó una bronca terrible y maldiciendo el día en el que nació por estar con Sien.

Fue siempre un hombre solitario, de aspecto desaliñado y con la mirada hundida y perdida. Decía que solamente se sentía un ser humano lúcido cuando pintaba, ya que podía llegar a llorar cuando pintaba.

En 1880 empezó su etapa de pintar de forma regular y empezó retratando a campesinos, que según decía eran lo único natural que quedaba ante tanta sociedad industrial. Una de estas obras fue la de "Los comedores de patata".

En 1886 se mudó a París, para vivir junto a su hermano menor Theo Van Gogh, quien sería el soporte más fuerte de su vida y de sus aspiraciones artísticas. Se instalaron en Montmartre y empezó a codearse con los artitas de la época que allí se reunían creciendo como pintor y como ser humano. Conoció a Émile Bernard y a Henri de Toulouse-Lautrec, haciéndose gran amigo de ellos. Van Gogh como muchos pintores de la época admiraba el arte japonés-cífrense: Hokusai, Hiroshige, Utamaro..., prueba de ello son las réplicas que realizó de grabados japoneses y algunas pinturas suyas que reproducen pinturas de ese país a manera escenográfica.

En 1888 se instaló en Arlés al sur de Francia, con la intención de crear un taller de artistas en su casa, llamada la casa amarilla, el color favorito de Vincent. El único que atendió a su petición del taller fue Paul Gauguin, que se desplazó hasta allí. Vincent le hizo un cuadro de bienvenida, "La Habitación" y pasaron juntos una temporada, en la cual los desórdenes mentales de Vincent impidieron que la relación se mantuviera. El 23 de diciembre Gauguin salió a caminar, en cierto momento sintió pasos tras él, al girarse descubrió a Van Gogh que se acercaba a él de manera agresiva. Al verse descubierto, Van Gogh se retiró y Gauguin prosiguió su camino. Al regresar Gauguin al estudio que compartían encontró a Van Gogh sangrante tras haberse amputado una oreja, que quiso regalar a Paul. Éste más tarde se la regalaría a una prostituta. Lo encontraron en mal estado de salud por su herida en la oreja y por sus crisis epilépticas.

Regresó a Arlés junto con un amigo para ir a su casa, en donde descubren que sus cuadros estaban cubiertos por el moho y rasgados por los envidiosos vecinos lo que provoca otra depresión en él. Los últimos años de Van Gogh estuvieron marcados por sus permanentes problemas mentales, que lo llevaron a ser recluido en sanatorios mentales de forma voluntaria. Pero, la estrecha relación con su hermano, quien sostenía a Vincent económicamente, lo alentaba moralmente. Su comportamiento agresivo y solitario lo hacen ser un paria de los diferentes sitios donde habita y lo hacen vivir una vida de frustraciones amorosas al ser rechazado por cada una de sus pretendidas.

En el sanatorio de Saint-Rémy-de-Provence le es habilitada una habitación para que siga pintando. Aquí empezó una frenética vida artística en donde se inspiró en Rembrandt. En mayo de 1890 un amigo de Theo, el Doctor Paul Gachet, le invita a que le haga diversas consultas y como Vincent no tiene dinero le paga con un retrato del doctor. Durante los últimos treinta meses de vida llegó a realizar 500 obras y en sus últimos 69 días firmó hasta 79 cuadros.

Finalmente, el 27 de julio sale a caminar por el campo, se dispara con un arma de fuego en el pecho y regresa a su habitación para morir dos días después, dejando inacabado el cuadro llamado "Los Cuervos". Todos sus amigos acudieron a su pensión y Vincent no dejó de fumar en los dos días de agonía. En su entierro todos los que le conocían trajeron flores amarillas para su tumba. Antonin Artaud, con un extenso poema en prosa nos da la noción de la calidad de Van Gogh; bástenos leer algunos fragmentos de tal poema: "...Regreso al cuadro de los cuervos;¿quién ha visto como, en ese cuadro, equivaler la tierra al mar?(...)el mar es azul pero no de un azul de agua sino de pintura líquida(...)Van Gogh ha retornado los colores a la naturaleza, pero, a él, ¿quién se los devolverá?(...)aquel que supo pintar tantos soles embriagados sobre tantas parvas sublevadas, el Café de Arlès, la recolección de las olivas, los aliscampos;...'El puente', sobre un agua en donde se tiene el irrefrenable deseo de hundir el dedo en un movimiento de regresión violenta a la infancia,(...)".

Muchos historiadores comparten la teoría de que su locura podría deberse a que en su infancia tuvo que convivir junto a la tumba de un hermano que murió antes de su nacimiento y el cual se llamaba como él: Vincent van Gogh.


Gillian Sepúlveda